Los girasoles ciegos, de Alberto Méndez

LOS GIRASOLES CIEGOS
de Alberto Méndez
EDITORIAL ANAGRAMA, S.A.
160 pgs

12 euros

Los girasoles ciegos, libro que compendia cuatro relatos sutilmente interrelacionados es la única obra de Alberto Méndez, autor que falleció ocho meses después de la publicación de este trabajo que ha conseguido aunar en 3 años el favor de crítica, con premios de tanto prestigio como el Nacional de Narrativa, y público con las numerosas reediciones del mismo.

Sus cuentos, de temática guerracivilista, tratan sobre el mal de olvidar la misma y consiguen destacar sobre el alud de literatura dedicada al tema durante los últimos años en primer lugar por el cuidado y la calidad de de su prosa, milimétrica, artesanal, y en segundo por una visión de la guerra como "epidemia", enfermedad moral del hombre que lo destruye como ser humano dotado de alma, lo cosifica y lo convierte en bestia de carnicería. El libro se abre con una cita del poeta Carlos Piera donde se exige asumir el pasado para superar y se recuerda que en España "no se ha cumplido con el duelo", no se ha hecho, en definitiva, "nuestra la existencia del vacío" que provocó el golpe de estado franquista y la consiguiente guerra civil de exterminio predeterminado de un enemigo social y político.

Cuatro derrotas jalonan la obra: la de un capitán del ejército rebelde que el día antes de la victoria se pasa a las filas republicanas, avergonzado por el ansia de matar de sus superiores; la de un joven poeta que huye con su chica embarazada de la venganza y se enfrenta con serenidad a la muerte; la de un condenado a muerte que se ve en la tesitura de elegir entre morir rodeado de mentiras o decir valientemente la verdad a quienes no desean oirla y las de, simultaneamente, un niño, un cura y unos adultos sumidos en una espiral de lascivia, deseos prohibidos, miedo y culpabilidades.

Todas las historias se definen porque sus personajes escriben. Seres complejos, no actuantes, que encuentran en la confesión escrita de las más diversas formas alivio a sus culpas o comunicación con los que, creen, ya no verán más. Además la alternancia de narradores, muy abigarrado en el último relato, donde hasta cuatro voces se roban la palabra párrafo a párrafo, enriquecen la narración con diversos puntos de vista

Interesante trabajo, quizá algo extemporáneo, que merece la pena ser leído ante esta auténtica avalancha de porquería maniquea sobre la Guerra que sufrimos en este país.