miércoles, 5 de diciembre de 2007

Cantar de los cantares


'El cantar de los cantares' es el libro más hermoso de la Biblia y el más cercano al estilo de 'Las 1001 noches': un poemario erótico profano, muy del estilo de los cantares árabes, donde nunca se nombra al vengativo y celoso dios judío sino que se resalta el amor, la pasión y el deseo.


Bernardo de Claraval o san Juan de la Cruz, excelentes escritores además de clérigos, compusieron variaciones y poemas sobre el Cantar. La traducción del mismo al castellano le costó la cárcel a Fray Luis de León a manos de quienes decían defender la verdadera religión, la Santa Inquisición.


Hoy el Cantar ha llegado a nosotros como un faro de luz en medio de la noche de la revelación divina. El amor impregna sus hojas y las llena de costosos perfumes, afeites y sedas. Nunca lo oiréis en misa, descuidad. El Cantar sigue siendo peligroso para los que sólo desean orden, silencio y miedos oscuros.


Os dejo uno de mis fragmentos favoritos:



-Estoy enferma de amor-

ELLA: Yo dormía, pero mi corazón velaba...
¡Un voz! Mi amor me llama:
«Ábreme, hermana mía, amiga mía,
paloma mía, mi perfecta;
mi cabeza está cubierta de rocío;
mis bucles, del relente de la noche...»
Me he quitado ya mi túnica;
he de ponérmela otra vez?
Me he lavado los pies;
¿los volveré a manchar?»
Mi amor metió la mano
por el cerrojo de la puerta;
al oírlo, mis entrañas retozaron.
me levanté para abrir a mi amor,
y mis manos destilaron mirra,
mirra fluida mis dedos
en la manilla de la cerradura.
Abrí a mi amor,
pro mi amor se había ido.
Se me fue el alma tras de él.
Lo busqué y no lo encontré,
lo llamé y no me respondió.

Que enferma estoy de amor.

1 comentario:

Sibyla dijo...

Iván, me ha encantado tu visita en mi blog, con ese fragmento tan delicioso que has dejado.
Tienes mucho mérito, veo que escribes todos los días, yo lo hago una vez a la semana y supone un reto de tiempo y esfuerzo.
Gracias por tus palabras y vuelve cuando lo desees.
Saludos.